Por Rogério Manzano
10 de Agosto de 2011
A los dirigentes deportivos cubanos les ha pasado con la pelota lo mismo que a sus jefes políticos con el socialismo en Cuba. Se pasaron 50 años en la edificación de algo que nadie supo cómo construir y, tras cinco décadas de estúpido sacrificio, se ven ahora caminando por el borde de un abismo.
Sí los políticos en su necedad ideológica, arruinaron la economía de un país que contaba con los recursos materiales y humanos para alcanzar altos niveles de prosperidad, los directivos beisboleros, por su parte, quebraron la pujante configuración empresarial que tenía la pelota cubana en 1959 hasta reducirla a solo un inoperante aparato burocrático del nuevo sistema político.
Hoy, cuando el socialismo intenta desesperadamente sobrevivir un poco más en la Isla con lineamientos y otros eufemismos más, la pelota cubana, en cambio, sigue endosada de parches y remiendos caricaturescos, que ni revitalizan, ni mejoran, uno de los antídotos imprescindibles del cubano común para distanciarse de su rosario de problemas diarios.
En Cuba todo el mundo conoce como se mezcla política y béisbol, desde el primer Secretario del Partido en una provincia que interviene para elegir un equipo local hasta el manager del equipo Cuba que recibe instrucciones de su Comandante por un móvil; aunque, para no desviarnos demasiado del tema, lo que se trata ahora es de enfrentar, una vez más, otra modificación del ya vilipendiado torneo doméstico, acorde con la más reciente reestructuración político-administrativa del país, ¿alguien dijo político?
Pero los fanáticos andan muy preocupados. Ya ni siquiera se trata de otra famélica actuación de su querida selección nacional, sino de las tribulaciones de la única liga de béisbol que el gobierno cubano les ha permitido disfrutar en estos 50 años a su propio pueblo: la Serie Nacional.
Y es que, en este asuntito de las reorganizaciones del torneo cubano, no por reiterativos los cambios, dejan de ser insólitos cada vez. Ahora resulta que sería posible tener un torneo con un número impar de clubes en competencia, algo nunca visto y que no es la norma en ningún circuito beisbolero que se respete, no sólo por una cuestión lógica, sino también logística.
Empero, cómo la pelota es un deporte netamente estadístico, antes de continuar quisiera arrojar un poco de luz sobre las cifras y los elementos de este complejo fenómeno. De este modo podremos ampliar nuestra visión sobre lo que ha significado esta anormalidad en la historia del béisbol cubano desde que se inauguraron las temporadas aficionadas en 1962.
Década de 1960
1962 – I Serie Nacional: estructura de 4 equipos, sistema de clasificación todos contra todos y formato de juegos de 30 partidos.
1964 – III Serie Nacional: se aumentó el formato de juegos hasta 35 partidos.
1965 – IV Serie Nacional: se aumentó el formato de juegos hasta 39 partidos.
1965 – V Serie Nacional: se modificó la estructura hasta 6 equipos y el formato de juegos se aumentó hasta 65 partidos.
1967 – VII Serie Nacional: se modificó la estructura hasta 12 equipos, de los cuales 6 llevaban el nombre de cada una de las provincias existentes en aquel momento. El formato de juegos se aumentó hasta 99 partidos.
1969 – IX Serie Nacional: se redujo el formato de juegos hasta 66 partidos.
Década de 1970
1970 – IX Serie Nacional: se estructuró y celebró, después de la SN, la primera y única versión de la Serie de los Diez Millones.
1973 – XII Serie Nacional: se modificó la estructura hasta 14 equipos y el formato de juegos se aumentó hasta 78 partidos.
1974 – XIV Serie Nacional: se redujo el formato de juegos hasta 39 partidos y todos los equipos con nombres de provincias fueron reemplazados.
1975 – XIV Serie Nacional: se estructuró y celebró, después de la SN, la primera Serie Selectiva.
1977 – VII Serie Nacional: se modificó la estructura hasta 18 equipos, de los cuales 12 llevaban el nombre de sus provincias (excepto Pinar del Río, Matanzas y Ciudad de la Habana) y del Municipio Especial. El formato de juegos se aumentó hasta 51 partidos.
Década de 1980
1983 – XXIII Serie Nacional: se modificó el sistema de clasificación con la introducción de dos Divisiones y el formato de juegos se aumentó hasta 75 partidos.
1985 – XXV Serie Nacional: se modificó el sistema de clasificación con la sustitución de las dos Divisiones por las Ligas Occidental y Oriental y se creó el primer Playoff. Se redujo el formato de juegos hasta 48 partidos.
1987 – XXVII Serie Nacional: se modificó el sistema de clasificación, ambas Ligas desarrollaron sus calendarios de forma separada y acumularon y computaron estadísticas y líderes individuales también de forma separada.
1989 – XXIX Serie Nacional: se modificó el sistema de Playoffs.
Década de 1990
1990 – XXX Serie Nacional: se modificó el sistema de Playoffs.
1991 – XXXI Serie Nacional: se modificó el sistema de Playoffs.
1992 – XXXII Serie Nacional: se redujo la estructura hasta 16 escuadras y todos los equipos volvieron a utilizar los nombres de provincias, excepto Ciudad de la Habana, se modificó el sistema de clasificación con la subdivisión de las dos Ligas en cuatro Grupos clasificatorios. Retornaron los juegos interzonales y se modificó el sistema de Playoffs.
1996 – XXXVI Serie Nacional: desapareció la Serie Selectiva y se estructuró y celebró, después de la SN, la primera Copa Revolución.
1997 – XXXVII Serie Nacional: se modificó el sistema de Playoffs.
1998 – XXXVIII Serie Nacional: desapareció la Copa Revolución.
Década de 2000
2002 – XLVI Serie Nacional: se estructuró y celebró, después de la SN, la primera Súper Liga.
2006 – XLVI Serie Nacional: desapareció la Súper Liga.
2008 – XLVIII Serie Nacional: se modificó el sistema de clasificación, desaparecieron los Grupos clasificatorios y se retornó al sistema clasificatorio zonal.
Luego de enlistar este precioso catálogo de modificaciones podemos obtener resultados interesantes. Por ejemplo, de las 50 temporadas nacionales celebradas hasta la fecha, y sin computar aún la próxima Serie de 2011-12, en 24 de ellas se ha realizado al menos una alteración de cualquier tipo, lo que representa casi un promedio del 50 por ciento, es decir mínimo un cambio cada dos años.
También descubrimos que la categoría más veces rectificada ha resultado la estructura con 11. Esto último, teniendo en cuenta que tanto la Serie de los Diez Millones, como las Selectivas, Copas Revolución y Súper Ligas, en el momento de su aparición o desaparición, afectaron, influyeron o determinaron de forma estadística, organizativa o de alguna otra manera, el tipo de estructura que se usó en cada campaña.
Por su parte, el formato de juegos ha sido otro de los más desprestigiados en las contiendas cubanas después de 1962, con al menos 10 transformaciones anuales en las que se corrigió el total de partidos efectuados. El sistema de competencias (5), los Playoff (5) y las variaciones en los equipos con nombres de provincia (3), aportan otra vertiente del cambia-cambia de estos mal llamados 50 años de pelota “revolucionaria”.
No hay que olvidar que, a partir de la Serie 51, todavía veremos otro incremento en estos dígitos, en cuanto a la forma de la estructura y en el total de los equipos con nombres de provincia.
Mi pregunta es, y retomo la idea al principio de este artículo, ¿alguien sabía lo que se estaba haciendo en materia de béisbol en estos 50 años en Cuba? Evidentemente que no.
Es cierto que todas las ligas de béisbol del mundo a veces realizan ajustes en su funcionamiento. Es normal y forma parte del proceso evolutivo de esas organizaciones. Lo que no creo es que ninguna lo haga de una manera tan constante y absurda como se ha hecho en Cuba desde 1962.
Por si las dudas, yo tengo una proposición para la Comisión Nacional, si en definitiva Metropolitanos permanece en el torneo. La mejor manera de equilibrar el total de equipos en este gran experimento es incluir un conjunto con sede en Miami.
No sólo se resolvería el problema de cerrar el certamen en una cifra par, sino que también podrían cumplirse varios lineamientos del último Congreso del Partido, que estoy seguro harían sentir muy feliz al Comisionado Higinio Vélez. Les sugiero analizar cuidadosamente.
Primero, se estaría ofreciendo una respuesta concreta a la última orientación que brindó el general-presidente Raúl Castro, quien ordenó realizar un acercamiento más profundo con la emigración cubana.
Segundo, sería un extraordinario paso hacia la autoeficiencia y rentabilidad económica de la pelota. Colocar una escuadra de la Serie Nacional en Hialeah aliviaría considerablemente las arcas de la FCB con una entrada de divisas fuertes, solamente por concepto de recaudación de boletos, ni hablar de las croquetas, los batidos u otras opciones.
Tercero, se estaría manifestado una de las vertientes sin explotar del llamado intercambio cultural, al permitir que jóvenes atletas cubanoamericanos pudieran jugar pelota en la tierra de sus padres, y que hasta el presente ha sido limitada solo a manifestaciones dentro del terreno musical o académico.
Cuarto, se resolvería el asunto de los estímulos de viaje al extranjero para los peloteros cubanos que, los pobres, cada año apenas les alcanza el ánimo para luchar por un número limitado de plazas que les permite darse una vueltecita por Rotterdam o por un país del Alba, pero que casi siempre terminan en manos de los mismos.
Además, establecer un equipo en Miami tiene más importancia que tener otro en la Isla de la Juventud, no sólo porque también se encuentra ubicada fuera del principal territorio insular del archipiélago, sino porque es la ciudad con mayor cantidad de habitantes cubanos en el mundo, después de La Habana.
Es cierto que en el cuarto punto podría crearse un sensible conflicto de intereses, pero esa es una buena historia para otro artículo, después que se dilucide el dilema de Metropolitanos en la próxima Serie Nacional.
muy bueno el final, totalmente inesperado despues de la crispacion por los cambios de estructura. Y la propuesta de que Miami participe es totalmente revolucionaria. Digo, eso es lo que ellos dicen.
Excelente trabajo que reproduzco en nuestra pagina, no hay que comentar nada todo queda dicho en él
Lastima que alguien pierda el tiempo en leer semejante basura. Tu sabes que todos los problemas no vienen de la isla. Seria muy bueno que algo asi sucediera, pero estoy seguro que el mayor obstaculo lo pondrian en Florida, enviale esa propuesta a iliana Ross o a Diaz-Balart y es posible que te ascusen de agente de la seguridad. Hace unos dias estaba previsto que un equipo infantil fuera a jugar a Cuba y que paso?, lo de siempre, viola las leyes del embargo ….. Viene Pablo milanes y estan haciendo lo imposible por evitarlo. Puede un jugador cubano sin abandonar la isla venir a jugar en cualquier liga vinculada a las GL?. Claro que no, solo lo firman si abandona el pais y obtiene residencia en un tercero o en el propio Estados unidos. El problema va mas alla de ese simple analisis que siempre pone como culpable de todo a los mismos. Los de la isla estan tratando de corregir el rumbo en algunos sentidos pero los de Miami que hacen?. Es muy facil hacer estos analisis y estos comentarios sin mirar el porqu’e de las cosas. Es cierto que en Cuba se han cometido y se cometen multiples errores en todos los aspectos de la vida cotidiana, pero a ningun otro pais lo han sometido a un “gardeo” tan rigido y ha resistido por tanto tiempo. Asi que no te doy ningun credito por esto que has escrito, lo de los cambios es algo que en Cuba se ha dicho muchas veces y la prensa ha criticado a la comision nacional.
coño que fula este creo que en vez de ruiz debió ser ruz
Oye Ruz que diga Ruiz la botaste por los 500 cuando dices que la habana esta haciendo algunos intento de que?????? si ayer mismo metieron a la fuerza a una mujer indefensa en un carro patrulla que lo vio todo el mundo creo que basura es lo que tienes tu pero en la cabeza esa y de la cara ya ni te digo hormigón armado
una cosa es discrepar de un tema que por cierto este señor le dio la gana de escribir porque para eso es su sitio y ademas tu no tienes ninguno donde soltar toda la bazofia esa que hablas ( o si ) y otra cosa es echar con la cara como estas haciendo tu la cagastes con tu verborrea totalitaria y robolucionaria de lo que pudo ser una buena critica disentida de un tema
el gardeo es el que le tiene el tirano al pueblo hace ya 52 años cara de guante fijate si lo que tu tiene en la careta esa es mamey de santo domingo
aquí en este video se ven muy bien los esfuerzos que hace actualmente el gobierno cubano y que se refiere Ruiz en su comentario observen el gardeo a que es sometida la policia por parte de esa delincuente peligrosa
http://www.elnuevoherald.com/438/index.html?media_id=106053741&genre_id=5137
El cantautor cubano Pablo Milanés, que se presenta por primera vez en Miami y reconoce como fue una de “las víctimas’’ de la represión del gobierno cubano, que lo mantuvo un año y medio en los “campos de concentración” conocidos como la UMAP (Unidades Militares para la Ayuda a la Producción).
Criticó además el sistema de “castas” que mantiene el gobierno, la discriminación contra los negros y la auto censura de la prensa cubana. Aun así, dijo ser fiel al sistema socialista, y seguir dispuesto a permanecer en la isla.
Lo que se plantea aquí es una quimera claro pero es una idea valida que hay que respetar como las demás que hallan por ahí no pusieron hoy mismo en un blog del cual no quiero acordarme el nombre y mucho menos el del autor que el coma-andante-en- jefe el mismo que ha destruido la pelota en cuba es el 4to bate moral suyo, pues que juegue un equipo cubano en Miami es mas creíble mil veces es mas viendo el rumbo que están tomando las cosas aquí en la capital del sol, lo veo positivo a corto plazo.